Tres cosas hay en la vida: salud, dinero y amor. Del dinero muchas veces es mejor no hablar, y del amor decimos exactamente lo mismo puesto que cada persona lo vive de una manera completamente diferente. Por tanto, lo que nos compete en los párrafos que vais a leer a continuación es hablar de la salud, aquello que siempre destacamos cuando nos falta y que siempre suele ser considerada como la tercera pata de las tres… y no la primera, que es la que debería ser. Sin salud es imposible tener una vida de calidad, eso lo debemos tener meridianamente claro, y por tanto debemos hacer todo lo que esté en nuestra mano para cuidar de nuestro cuerpo.
Lo primero que debemos tener en cuenta es que la salud tiene diferentes ramas y que es importante estar al tanto de lo que necesita cada una de ellas. Si cuidamos de nuestra salud física pero descuidamos la mental, vamos a padecer más problemas de los que podemos llegar a pensar en un principio. Si cuidamos de la salud dental pero dejamos de lado la cardiovascular, también podemos estar expuestos a muchos peligros. Lo mejor es que lo tengamos todo en cuenta ya no solo para evitar riesgos para la vida de nuestra persona, sino para tener la mejor calidad de vida posible. Ese es el mejor regalo que nos podemos hacer a nosotros y nosotras mismas, ¿no creéis?
Queremos destacar, en este artículo, la relevancia que tiene el cuidado de uno de esos aspectos de la salud de los que no solemos olvidar con bastante frecuencia pero que son elementales para el mantenimiento de esa calidad de vida que mencionábamos antes. Hablamos de la salud dental. Esa salud dental es la que nos va a permitir mantener alejados los dolores dentales y las enfermedades derivadas de la falta de higiene y limpieza en nuestra boca, cuestiones que son muy incómodas y que podrían hacer de nuestro día a día un verdadero infierno. Si habéis sufrido un dolor de muelas en algún momento de vuestra vida, os podréis hacer una idea de lo que estamos queriendo decir.
En España, no hemos destacado precisamente por el cuidado de nuestros dientes a lo largo de la Historia. Somos uno de los países europeos que cuenta con una peor posición en lo que respecta a este tema… y no será porque haya existido una falta de medios. Disponemos de una cantidad considerable de clínicas dentales y profesionales especializados en este ámbito, así que debemos hacer autocrítica y señalar que quizá deberíamos haberlos utilizado más para obtener una salud dental mejor. La autocrítica siempre es la mejor manera de empezar a cambiar las cosas porque deja claro que somos conscientes de que tenemos un problema.
Eso sí: no todo es problema de nuestra dejadez. En nuestra boca, es cierto que hay problemas que están directamente relacionados con el hecho de no habernos cepillado los dientes o de no haber acudido lo suficiente a nuestra clínica dental, pero también es cierto que pueden producirse anomalías en las que no tengamos la culpa. Si hay uno o varios dientes que no crecen como deberían o que no se sitúan en la posición exacta en la que se supone que deben estar, es evidente que no vamos a corregirlos con tres cepillados diarios. Cuando ocurre algo así, sí que tenemos bien asumido que necesitamos a un dentista. Y nos ponemos manos a la obra con ello.
La ortodoncia es la solución que se debe interponer en este tipo de casos. Vamos a repasar algunos de los datos que se derivan de un tratamiento como este en España para que veamos que se trata de algo perfectamente normal y que nos podría ocurrir a cualquiera de las personas que nos encontramos en este sitio web.
- De acuerdo con una información publicada en la página web Infosalus en el mes de septiembre del 2015, uno de cada cuatro españoles ha pasado por un tratamiento de ortodoncia en algún momento de su vida y el 70% querría ponérsela con el objetivo de mejorar su sonrisa y su boca en general. La noticia apunta también que la mayoría de las personas que se someten a este tratamiento pide ortodoncias invisibles por motivos estéticos, algo que no nos extraña teniendo en cuenta la importancia que se le otorga a la estética y la belleza en los tiempos que corren.
- También fue el portal web Infosalus el que informaba, en este caso en 2021, de que el 10% de la población infantil necesitó un tratamiento como del que estamos hablando a lo largo del año anterior, un año que fue bastante duro porque arrancó la pandemia y eso supuso la necesidad de contar con unas determinadas medidas de seguridad a la hora de acudir al dentista y prevenir posibles contagios por coronavirus.
La ortodoncia se ha convertido en una de las grandes necesidades de la población española en relación a la salud de sus dientes. Y es que no cabe la menor duda de que hablamos de un aspecto que es básico porque va a permitir que la posición de nuestros dientes no nos ocasione dolores y que, estéticamente, nuestra sonrisa también experimente una notable mejoría. Nos cuentan desde este dentista en Ourense, una clínica especializada precisamente en este tipo de tratamiento, que la necesidad de obtener estos servicios es bastante amplia en España y entre personas de todas las edades. La salud de todas ellas y la calidad de su día a día depende en buena medida de este tratamiento.
El cuidado de nuestros dientes es elemental durante una ortodoncia
Es vital que tengamos el máximo cuidado posible con nuestros dientes cuando nos encontramos inmersos en un tratamiento como lo es la ortodoncia. Es un momento idóneo para cuidar de nuestra alimentación, que a fin de cuentas es algo básico para que el desarrollo y la colocación de los dientes se produzca sin ningún incidente durante una ortodoncia. Os lo dirá el dentista, por supuesto, pero queremos reforzar ese mensaje y que seamos conscientes de que nuestra participación va a ser muy importante para que todo lo que tenga que ver con la ortodoncia salga perfectamente.
Por suerte, estamos hablando de un tratamiento que cuenta con la mejor tecnología y que es fiable. Ese es el motivo por el que hay tantas personas que no manifiestan tener ningún miedo cuando se les informa de que deben ser sometidas a él. A día de hoy, todas las herramientas, estudios y técnicas que son utilizadas en el plano de la salud dental están más que comprobadas y esto nos debe motivar todavía más a cuidar de nuestra salud dental con independencia del problema que tengamos o de la periodicidad con la que acudamos a realizar nuestras revisiones.
En España, contamos con los mejores medios en materia de salud dental y esa es una garantía para toda la población de nuestro país. Además, es algo que permite que sea aquí donde las ortodoncias son más fiables. Para todas aquellas personas que necesitan de los mejores cuidados para mejorar su salud dental, esto ofrece tranquilidad y una imagen todavía más poderosa de nuestra salud dental, cuestión que en España nos estamos empezando a tomar muy en serio y que sin duda también va a generar mejoras sustanciales en la calidad de vida de la gente y las posibilidades para mantener a salvo nuestra boca de cualquier problema dental.
La higiene dental es un aspecto básico para impedir la generación de virus
Queremos hacer, para concluir, un alegato al cuidado de nuestros dientes en general, más allá de que necesiten o no una ortodoncia. Durante la pandemia, fueron muchas las personas que comenzaron a entender la importancia de cuidar de la higiene dental más allá de tener una sonrisa blanca. Resulta que la boca es una de las principales puertas de entrada de infecciones y virus en nuestro cuerpo. Esto exige que mostremos una limpieza pormenorizada de nuestra boca y que no demos la opción de que podamos llegar a sufrir uno de esos contagios. Y no estamos hablando solo de coronavirus: es posible que, si no cuidamos de los dientes como deberíamos, suframos las consecuencias de un montón de enfermedades más que van a limitar y mucho nuestra calidad de vida.
Estamos convencidos de que va a continuar creciendo el número de personas que cuidan de esa higiene bucal de la que estamos hablando. Hoy en día, gracias a la tecnología, hay más información que nunca al alcance de todo el mundo y sabemos perfectamente lo que puede ocurrir, lo que nos podemos complicar la vida, si no somos lo suficientemente responsables como para estar atentos a todas las necesidades que tengan nuestra boca y actuemos en consecuencia para proporcionarlas. Por eso, es hora de ponerse manos a la obra y empezar a trabajar para conseguir disponer de una boca libre de peligros. Los resultados seguro que os dejan satisfechos.