Seis errores que se deben evitar a la hora de elegir un interim manager para tu empresa

La interim management goza de una creciente popularidad en España. Esto no es sorprendente, después de todo, el valor añadido que ofrecen los gestores temporales es enorme. Y si un mandato sale mal, a menudo es culpa de la empresa, de una información inexacta y rara vez del propio interim manager.

Para que ti, como responsable de una empresa, puedes encontrar el interim manager adecuado para tu problema empresarial, pero deberías evitar los 6 errores típicos a la hora de elegirlos y que nos han señalado los profesionales de AMG.

Error 1: demasiado enfoque en las calificaciones y la experiencia

En el proceso de selección, las empresas suelen buscar cualificaciones claras y prestan menos atención a la experiencia que tiene un interim manager. Pero los interim managers exitosos no mejoran las empresas simplemente porque hayan tenido una buena formación académica. Sino porque se ponen manos a la obra, mantienen la cabeza fría en situaciones críticas y toman decisiones que nadie más se atreve a tomar. Pueden hacerlo porque ya han visto a innumerables empresas desde dentro en situaciones críticas. Su conocimiento experiencial les permite tomar decisiones rápidas y específicas, y no sus estudios.

Consejo: a la hora de elegir, presta atención a la experiencia del interim manager, incluidas las que haya tenido en otros sectores. También aporta importantes conocimientos a tu empresa y aporta nuevas ideas.

Error 2: No hay ajuste cultural

Cuando los clientes reciben una lista de candidatos de un proveedor de gestión interina y tienen una conversación inicial con posibles gerentes interinos, se toma una decisión basada en criterios racionales y subconscientemente emocionales. La decepción es grande cuando se descubre más adelante en el mandato: el interim manager en realidad no encaja en absoluto en la cultura de la empresa. Es un cuerpo extraño. Y aunque los interim managers no tienen que ser amigos de todos en la empresa, deben comprender la filosofía y los valores de la empresa.

Consejo: no te limites a trabajar con números, datos y hechos en la consulta inicial. Aborda también los hechos blandos y compara los valores del interim manager con los de la empresa. Ponte en forma culturalmente.

Error 3: decidir según el precio

Las tarifas diarias de un interim manager pueden parecer un poco aterradoras a primera vista. Cuando calcula el retorno de la gestión interina, rápidamente te das cuenta de que su tarifa diaria es razonable en comparación con el valor añadido que te ofrece un interim manager. El retorno de la gestión interina es el beneficio del flujo de efectivo neto de la actividad provisional, dividido por el costo del contrato de gestión provisional. El retorno de la gestión interina suele estar entre el 100 y el 400 por ciento. Entonces la pregunta es: ¿Cómo sería tu empresa si no hubieras contratado a un interim manager?

Consejo: nunca decidas en función de la tarifa diaria. Ya se conoce la cita: «Si crees que es costoso contratar a un profesional para hacer el trabajo, espera hasta contratar a un aficionado».

Error 4: Descripción del puesto poco clara y resistencia al asesoramiento

Quien no pueda describir claramente lo que la empresa necesita, generará malentendidos. Especialmente si tú, como cliente, no estás abierto a las ideas y sugerencias que aporta el interim manager. Porque entonces el interim manager no podrá resolver la tarea específica junto contigo. El resultado: no se comprende el núcleo de la tarea desde el principio, por lo que cada uno trabaja en una dirección diferente. ¡Puro desperdicio de recursos!

Consejo: intenta formular tu problema y tarea con la mayor precisión posible y describe los tres objetivos más importantes con oraciones completas. Si no puedes hacerlo, comunícalo directamente y déjate guiar. Los interim managers pueden resolver los problemas reales y las medidas de acción junto con sus clientes.

Además, si lo desean, pueden asesorar a la dirección sobre cuestiones específicas y desafíos actuales. Para muchos responsables, los interim managers son el interlocutor neutral y competente a la altura de los ojos que de otro modo no podrían encontrar en la empresa.

Error 5: Metas poco realistas

Sí, los gerentes interinos ofrecen un alto desempeño. Pero no tienen poderes sobrenaturales. Quien fija objetivos a ciegas y ni siquiera puede discutirlos crea inmediatamente una atmósfera negativa: con el interim manager, que tiene que discutir con los clientes sobre los ajustes de objetivos, y con los empleados, que no celebran el éxito porque no pueden alcanzar el objetivo, etc.

Consejo: desarrolla los objetivos y subobjetivos junto con el interim manager. De esta manera, ambas partes tienen claridad sobre hacia dónde debe ir el reto. Describe los pasos acordados para lograr el objetivo con la mayor precisión posible. Pero también dale al gerente interino suficiente flexibilidad.

Error 6: No hay acceso a los datos y recursos necesarios

No importa lo bueno que sea un interim manager, si le niegas el acceso a la información, los datos y los recursos necesarios, no te encaminará hacia el éxito. Además, alterarás la relación de confianza con el interim manager y sentarás las bases para una relación comercial tóxica. Además, ralentiza el progreso del interim manager, que de todos modos sólo estará en la empresa por un tiempo limitado. A veces, las empresas se dan cuenta después de que no pueden proporcionar al interim manager los recursos necesarios y le confían tareas rutinarias. Un placer caro.

Consejo: proporciona al interim manager toda la información, los datos y los recursos necesarios. Comprueba desde el principio si realmente puedes proporcionar los recursos necesarios (mano de obra, recursos financieros, etc.).

Otro consejo secreto: ¿generalistas o especialistas?

Contratar a un generalista que no tenga ninguna experiencia específica suele tener poco sentido. Nadie necesita un “hombre para todos los casos”, porque normalmente sólo hay un problema en un lugar de la empresa.

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