Muchos conductores que dejan el coche en la calle recurren al aire acondicionado nada más arrancar el vehículo. Es importante abrir las ventanillas para que se vaya el calor concentrado del interior del coche y el climatizador va cogiendo la temperatura adecuada.
Ponerse al volante en un ambiente extremadamente caluroso puede derivar en consecuencias que amenazan a la salud, ya que mucha temperatura en el cuerpo puede producir somnolencia.
Es necesario revisar el líquido anticongelante, porque en estos meses también controla la temperatura del motor y evita el sobrecalentamiento.
La Dirección General de Tráfico (DGT) y el Real Automóvil Club de España (RACE) explican que «conducir sin la temperatura adecuada en el habitáculo, que debería estar entre los 21 y los 23 grados, nos puede poner en peligro».
Además, conducir en situación de altas temperaturas, aumenta la fatiga y disminuyen los reflejos. Cada 200 o 300 kilómetros recorridos debes estirar las piernas, dar un pequeño paseo, refrescarte la cara con agua fresca y, sobre todo, hidratarte.
«Según algunos estudios, con altas temperaturas, el riesgo de accidente aumenta hasta un 20%. Además, con calor vemos peor. Cuando conducimos con 35º dejamos de ver entre el 10% y el 20% de la señales de tráfico. Asimismo, el calor excesivo puede aumentar también la agresividad y el nerviosismo», comentan desde la DGT.
“Varios estudios han comprobado que con temperaturas de 35º, el interior de un automóvil podría alcanzar los 55º en poco más de una hora. Debes saber que conducir con 35º es similar a hacerlo con una tasa de alcohol de 0,5 mg. «La exposición continua a temperaturas elevadas afecta a la habilidad del cuerpo de compensar la temperatura corporal y puede producir mareos», explican desde la DGT.
La temperatura óptima es entre 22 y 24 grados, pero hay que evitar el aire directamente a la cara y al pecho.
“Con altas temperaturas y una fuerte luminosidad hay mayor fatiga ocular y se pueden percibir efectos ópticos sobre la carretera, debido básicamente al aire caliente que desprende el asfalto. Estas circunstancias, unidas a pequeños mareos, hace que se altere de manera sensible la percepción del entorno, lo que puede resultar especialmente grave para la correcta percepción de las señales de tráfico”, dice Luis Montoro, catedrático de Seguridad Vial y presidente de honor de FESVIAL.
Es importante enfriar el coche cuando está muy caliente. Pero si no quieres utilizar el aire acondicionado, puedes optar por un método para bajar hasta 10 grados la temperatura del vehículo en pocos minutos.
La técnica, que hay que practicar con el coche parado, consiste en abrir y cerrar enérgicamente las puertas hasta cinco veces. Este truco provoca una gran corriente de succión dentro del vehículo que permite que el aire caliente salga por la puerta y el aire fresco entre por la ventanilla.
«Otro de los trucos que puedes poner en práctica es el de colocar en el suelo del coche unas bolsas de hielo. Por supuesto, deben ser impermeables. Así conseguirás reducir la temperatura del vehículo», informan desde el periódico digital Okdiario.
Además, de estos trucos debes tener en cuenta las siguientes recomendaciones para conseguir
una buena conducción en condiciones de altas temperaturas:
– Vestir ropa fresca y holgada.
-Evitar conducir en las horas de más calor.
-Ventilar el coche antes de iniciar el trayecto.
– Beber agua para mantener una buena hidratación durante todo el trayecto.
Lo mejor es prevenir que el coche coja mucha temperatura siempre que se pueda, porque el sol no solo incrementa la temperatura del interior sino que daña la pintura del coche.
En estos casos es aconsejable preguntar a expertos en sistemas avanzados de procesamiento de chapa y por eso, nos pusimos en contacto con la empresa Tecoi.
Estos expertos nos contaron que para proteger la pintura del coche en verano debemos seguir los siguientes consejos:
-Intentar estacionar siempre a la sombra.
-Proteger el automóvil con una lona.
-Lo ideal es que quede lo menos expuesto posible en las horas centrales del día, es decir, entre las 12:00 y las 16:00 horas.
-Aplicar encerado una vez al año, ya que la pintura estará más protegida y resistirá mejor las agresiones externas.
En verano también debes proteger tu coche del salitre y la arena de la playa. Hay que evitar desplazarse por zonas en las que se acumule arena.
Pero si el coche se ha ensuciado de arena, debes limpiar las alfombrillas en profundidad y la carrocería con una esponja, agua y jabón. Después, de limpiar aclara con agua abundante y seca la superficie con una toalla o bayeta de microfibra.
¡Con estos consejos lograrás cuidar la pintura de tu coche!