Es importante que en las residencias, los fisioterapeutas trabajen en estrecha colaboración con el personal médico para mejorar la autonomía de los ancianos. Las personas mayores que viven en las residencias pueden tener problemas de salud crónicos, como diabetes, enfermedades cardíacas y artritis, que requieren atención médica adecuada.
Es importante que en las residencias, los fisioterapeutas trabajen en estrecha colaboración con el personal médico para detectar posibles problemas de salud. Estos expertos en esta disciplina deben realizar evaluaciones regulares de los residentes para detectar si tienen problemas de movilidad y realizar un tratamiento adecuado. En este artículo, exploraremos las ventajas de la fisioterapia geriátrica en residencias de mayores.
¿Cuáles son las ventajas?
La fisioterapia geriátrica ofrece las siguientes ventajas.
Monitorear los signos
En las revisiones regulares, los fisioterapia pueden ayudar a monitorear los signos vitales de los residentes, como la presión arterial y la frecuencia cardíaca.
Ejercicios
Los fisioterapeutas aconsejan ejercicios específicos para ayudar a los residentes a controlar sus problemas de salud. Estos ejercicios pueden mejorar la movilidad articular y prevenir dolores.
Informar al personal médico
Si se detecta un problema de salud, el fisioterapeuta puede informar al personal médico para que puedan elegir el mejor tratamiento.
Asesoramiento
Los fisioterapeutas pueden asesorar al personal de la residencia sobre cómo cuidar adecuadamente a los residentes con artritis o movilidad reducida. Esto puede ayudar a mejorar la calidad de vida de los pacientes geriátricos.
¿Cuáles son los beneficios de la fisioterapia para los pacientes geriátricos?
Los expertos en geriatría de la Residencia de ancianos Castilla nos explican los beneficios principales de la fisioterapia geriátrica.
Mejora la movilidad
La fisioterapia ayuda a mejorar la movilidad de los pacientes geriátricos, ya que el fisioterapeuta utilizar ejercicios de fortalecimiento y estiramientos. Estos ejercicios son aconsejables para aquellos que tienen problemas de movilidad o que se han sometido a cirugía ortopédica. Los fisioterapeutas pueden utilizar ejercicios de fortalecimiento y estiramientos, para mejorar la fuerza y flexibilidad de las articulaciones.
A medida que envejecemos nuestros huesos se debilitan, lo que puede provocar caídas y fracturas óseas. La fisioterapia puede ayudar a mejorar la fuerza de los músculos, por lo que previene las caídas. Los expertos en esta disciplina pueden recomendar ejercicios específicos para mejorar la movilidad.
Alivia el dolor
Los pacientes geriátricos a menudo sufren de dolor crónico porque sufren enfermedades degenerativas, pero el fisioterapeuta opta por los masajes y los estiramientos para aliviar el dolor y mejorar su estado de ánimo.
Mejora la independencia
La fisioterapia geriátrica puede ayudar a mejorar la independencia de los ancianos para que realicen tareas cotidianas de manera más fácil. Esto puede incluir cosas como levantarse de la cama o vestirse. Es importante que la residencia de ancianos cuente con un fisioterapeuta para que pueda desarrollar un plan de tratamiento personalizado que aborde las necesidades específicas de los residentes. Esta disciplina mejora la calidad de vida de los pacientes geriátricos porque mejora su movilidad, alivia del dolor y mejora la independencia.
¿Cuáles son los ejercicios terapéuticos que realizan los ancianos?
Los residentes deben realizar algunos ejercicios terapéuticos para mejorar su movilidad y autonomía. El fisioterapeuta apuesta por los ejercicios de fortalecimiento para los músculos de las piernas, los brazos, la espalda y el abdomen. Los ejercicios pueden ser adaptados según el estado de salud del anciano. El experto en esta disciplina recomienda los ejercicios de coordinación para prevenir caídas. Los ancianos deben caminar en línea recta o realizar ejercicios de transferencia de peso. Desde 20minutos explican que «la fisioterapia actúa como motor de prevención de lesiones y caídas en las personas mayores”.
Los residentes pueden realizar estiramientos suaves para los músculos de las piernas, los brazos y la espalda. Estos estiramientos ayudan a reducir los dolores en los músculos y articulaciones. Los estiramientos de piernas son idóneos para aumentar la resistencia física y mejorar la movilidad. Para realizar este estiramiento, el anciano se sienta en una silla y levanta las piernas, tratando de mantenerlas rectas. Todos los ancianos pueden realizar los estiramientos, especialmente los que sufren artritis.
El fisioterapeuta que realiza sesiones en la residencia de ancianos puede adaptar los ejercicios según las necesidades y condición física de los ancianos. También son importantes los ejercicios de movilidad articular porque pueden ayudar a mejorar la flexibilidad de las articulaciones y reducir el dolor en pacientes con enfermedades degenerativas. Los fisioterapeutas pueden recomendar ejercicios de movilidad articular para las rodillas, la espalda, las muñecas y los hombros. Antes de realizar estos ejercicios, el fisioterapeuta se encarga de crear un entorno adecuado, por lo que elimina los obstáculos del suelo.

